En las clases de natación estamos empezando a ver los tipos de salidas de los diferentes estilos, la que más me llama la atención es la de espaldas, ya que, es la única que se hace desde dentro del agua.
Por eso vamos a ver como se lleva a cabo.
La salida de espalda se realiza desde el agua. Una vez que todos los nadadores están alineados en sus posiciones, se dará la señal de salida y los nadadores se impulsarán y comenzarán a nadar de espalda, pudiendo antes, estar sumergido durante una distancia nunca superior a los 15 metros.
Fases:
Posición preparatoria: Mientras se espera la orden de "preparados", los nadadores están en el agua de cara a la pared y agarrando la barra de salida de espalda con ambas manos. Los pies se apoyan en la pared, pudiendo estar por encima de la superficie, y las piernas deberán estar flexionadas para darse impulso y las caderas dentro del agua.
Impulsión en la pared: Al sonar la señal de salida, el nadador echa su cabeza hacia arriba y hacia atrás dirigiendo su mirada hacia el otro lado de la piscina, es decir, el cuerpo se impulsa hacia arriba y hacia atrás.
Vuelo: Ya se ha perdido contacto con la pared y por lo tanto entramos en la fase de vuelo. Los brazos sobrepasan la cabeza hasta que el cuerpo está totalmente estirado hasta el punto de arquear la espalda.
Entrada: Punto máximo de arqueo de la espalda y el momento de entrada en el agua. Primero entrarán las manos, seguidas de los brazos, tronco y piernas. Es donde se debe inhalar aire para la inmersión.
Deslizamiento, batido y propulsión: Después de la entrada, hay que levantar las manos para cambiar la dirección y corregir la profundidad. Antes de que el nadador pierda parte de la velocidad adquirida, deberá efectuar algunos batidos, bien de delfín o bien de crol. Una vez que el nadador esté en la superficie, comienza a dar la primera braza con un brazo extendido por encima de la cabeza. La salida finaliza y comienzan los ciclos normales de brazos.